Mi cruel compañero. 13

Todos estallaron en vítores y Alpha Edward me agarró por la cintura y me acercó a él mientras unía nuestros labios. El beso fue suave y tentador, nos movíamos en sincronía y un gemido escapó de mis labios, como una persona codiciosa, quería más y más, pero no podía, tenía que recordarme a mí misma q...