146. El peso es mío

ALAESTER

Maldita sea, nunca pensé que mi corazón podría ser destrozado así, como si una garra se hubiera clavado en mi pecho y arrancado todo lo que soy. Estamos en el salón de juicios, la gente me mira con curiosidad, pero todo lo que siento es el vacío donde solía estar mi madre, o quien pe...

Login to Unlock ChaptersPromotion