CAPÍTULO 6

PERSPECTIVA DE LILY

El restaurante estaba lleno de actividad a nuestro alrededor, pero Emily y yo estábamos absortas en una conversación que me revolvía el estómago. Emily me miraba, con los ojos muy abiertos, como si estuviera procesando cada palabra que salía de mi boca.

“Por favor, Emily, di algo,” le rogué, jugando nerviosamente con mi batido.

Ella parpadeó varias veces, todavía luciendo sorprendida. “Yo... no sé ni qué decir, Lily. ¿La boda de tu padre es mañana?”

“Sí. Aparentemente, él y Samantha decidieron oficializar las cosas muy rápido.” Suspiré, tratando de asimilar la velocidad de los acontecimientos.

Emily inclinó la cabeza. “¿Y solo conociste a esta Samantha hoy?”

“Sí, exactamente. Nunca la había traído antes, y ahora, de repente, se van a casar.” Revolví la pajilla en mi batido, sin saber cómo procesar todo. “Y de repente, solo éramos mi papá y yo, y a partir del lunes, seremos cuatro personas viviendo juntas... mi papá, ella, su hijo y yo.”

La mirada de Emily cambió de repente, como si se le hubiera ocurrido una idea. “Espera, ¿dijiste su hijo? ¿Qué quieres decir con un hijo?”

“Sí, tiene un hijo. Aparentemente, se suponía que iba a unirse a nosotros para el almuerzo, pero el tipo simplemente no apareció.” Respondí, todavía procesando toda la información.

Los ojos de Emily se agrandaron. “¿Y es guapo su hijo?”

La miré, sorprendida por el cambio de enfoque. “¿Guapo? Emily, estamos hablando de la boda de mi papá mañana y un cambio repentino en mi vida, ¿y te preguntas si su hijo es guapo?”

Ella se encogió de hombros. “A veces, una cara bonita puede hacer que todo parezca menos malo.”

Me reí, sacudiendo la cabeza. “Eres imposible, Emily. Pero, honestamente, ni siquiera he pensado en eso. Solo sé que todo es un lío.”

“Pero dime, ¿cómo fue el encuentro entre tú y Samuel?” Emily volvió al tema principal.

Tomé un sorbo de mi batido, tratando de posponer lo inevitable. “Bueno, nos conocimos en la cafetería, me llevó al concierto, luego hubo una fiesta en el hotel, y... terminé pasando la noche con él.”

Los ojos de Emily se iluminaron. “¡Wow, Lily! ¿Pasaste la noche con Samuel de The Wild Ones? Amiga, ¡cumpliste el sueño de toda fan de acostarse con su ídolo!”

Sacudí la cabeza, todavía encontrándolo difícil de creer. “Sí, lo hice. Fue surrealista, Emily. Pero ahora, con todo esto pasando, no sé qué pensar.”

Emily se rió y me dio un ligero empujón. “Pero en serio, Lily, ¡esto es increíble! ¡Imagínate contarle a tus hijos que perdiste tu virginidad con nada menos que Samuel de The Wild Ones!”

Puse los ojos en blanco, riéndome de la fértil imaginación de Emily. “Eres realmente algo, ¿lo sabías?”

Ella me guiñó un ojo. “Por eso me quieres, amiga.”

Nuestras risas resonaron en el restaurante mientras continuábamos nuestra conversación. Sin embargo, Emily adoptó un tono más serio.

“Pero en serio, Lily, no te dejes llevar demasiado por esto. Samuel es conocido por salir con varias chicas y jugar el papel de playboy. Puede que ni siquiera se acuerde de ti mañana.”

Asentí, de acuerdo con Emily. “Tienes razón. No quiero crear expectativas. Fue una noche increíble, pero sé que estas cosas con músicos famosos generalmente no van más allá de una noche.”

Emily sonrió y me dio una palmada reconfortante en la mano. “Así es, Lily. Disfruta el momento, pero no olvides mantener los pies en la tierra.”

Asentí, agradecida por la amistad y sensatez de Emily. Aunque la noche con Samuel fue un sueño hecho realidad, era bueno tener a alguien que me recordara la realidad. Después de todo, la vida continuaba, y ahora tenía una historia increíble que contar, aunque no supiera lo que el futuro deparaba.

Ella sonrió y de repente cambió de tono. “Entonces, ¿qué planeas hacer ahora?”

Reflexioné por un momento. “¿Ahora? Bueno, ahora tengo que encontrar un vestido decente para la boda de mi padre.”

La noche comenzaba a caer cuando Emily se despidió en la entrada del restaurante, dejándome sola para lidiar con mis pensamientos tumultuosos. Con la boda de mi padre y Samantha acercándose rápidamente, sabía que los cambios eran inevitables. Decidí caminar por la calle, absorbiendo el aire fresco mientras contemplaba lo que el futuro me deparaba.

Mientras me perdía en mis pensamientos, un coche comenzó a moverse a mi lado. Instintivamente, aceleré el paso, mirándolo de reojo. La ventana del conductor se bajó, revelando el rostro familiar de Samuel.

“¿Estás huyendo de mí?” bromeó, mirándome con una sonrisa traviesa.

Sorprendida, respondí, “¿Qué haces aquí? Pensé que te dirigías a Nashville con la banda.”

Samuel estacionó el coche, dándome una mirada juguetona. “Me quedé dormido y terminé quedándome atrás. Después de todo, pasé una noche maravillosa con una chica llamada Lily Thompson, quien luego me dejó solo.”

Un rubor calentó mi rostro. “Lo siento, Samuel. No sabía cómo reaccionar.”

Se acercó a mí y propuso, “Solo te perdonaré si vienes conmigo a un lugar especial.”

Curiosa, pregunté, “¿Qué lugar?”

Samuel tomó mi mano con una sonrisa misteriosa. “Es un secreto. Pero prometo que no tardaremos mucho.”

Miré el reloj y dudé. “Necesito comprar un vestido para una boda mañana. Las tiendas cerrarán pronto.”

Él me miró a los ojos con convicción. “Confía en mí, no tardaremos mucho. Será algo rápido.”

Sonreí ante la perspectiva de escapar un poco del caos que me esperaba en casa y acepté. “Está bien, Samuel. Vamos.”

Me subí al coche, y mientras él conducía, la ansiedad por la boda de mi padre se disipó un poco. Samuel mantuvo el destino en secreto, pero la idea de una escapada con él era tentadora.

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Ocurrió tan rápido; de repente, me encontré contra la pared, y él me estaba besando tan apasionadamente, su aliento llevaba un refrescante aroma a menta. No pude resistir y mordí suavemente su labio. Él se dejó llevar, aceptando la mordida, alejándose lentamente, haciendo que mis dientes rozaran su labio inferior.