Necesito hacerte mía

—¡Vaya, pero si mi hijo el perdido apareció!— Isabel ingresa caminando con elegancia.

—No es momento, madre. Estoy con mi padre. ¿Nos puedes dejar a solas?— Nicolai mira a su madre con firmeza.

—Estoy en mi casa, además quiero que tu padre solucione el malentendido del pasado. Aquí la única víctima ...