CAPÍTULO 58

En lugar de eso, apoyé mi cabeza contra su pecho, dejándome hundir en el calor que irradiaba de él.

—Lo sé, cariño. Pero no hay necesidad de esforzarte. Todavía estás adolorida, y si podemos evitar más dolor, deberíamos hacerlo. Te dejaré caminar un poco cuando estemos en la cafetería.

La forma en...

Login to Unlock ChaptersPromotion